El lago de Atlatitán.
El Lago Atitlán está rodeado por varios pueblos, 12 de ellos con nombres de santos, entre los que destacan Panajachel, Santiago Atitlán, San Pedro la Laguna, San Juan la Laguna y San Marcos la Laguna, el que dicen es el pueblo más bello del lago. Por lo que, si decides visitar este lugar, sería recomendable que le dedicaras más de una día de tu viaje.
Semuc Champey.
Conocido por muchos locales como el lugar más bello de Guatemala, Semuc Champey es uno de esos rincones que vuelven a recordarte que el mundo es realmente espectacular. Aunque si hay algo malo (o bueno, según se mire) son las horas que tienes que emplear para llegar, ya que no se encuentra cerca de ningún otro punto turístico del país. Eso lo hace mucho más espectacular si cabe ya que no son muchos los turistas que llegan hasta aquí, por lo que podrás visitarlo prácticamente en soledad.
Si después de leer esto al final te animas, ten en cuenta que desde Flores el trayecto es de unas 9 horas, aproximadamente, en furgoneta compartida, al que le tienes que añadir unos 45 minutos de trayecto en 4×4, donde probablemente irás de pie en la parte trasera, hasta llegar a alguno de los pocos alojamientos que hay en la zona de las pozas.
El Tikal.
Un maravilloso lugar en el que podrás apreciar la arquitectura de los pueblos indígenas de la zona. Una de las cosas que debes tener en cuenta son las entradas. El precio del tiquet que te permite el acceso al parque es de 150 quetzales por persona. El problema viene si te alojas en alguno de los tres hoteles que se encuentran ahí. Ya que si llegas al recinto antes de las 3:30 pm. Deberás comprar dos entradas, una para cada día de estancia, aunque el día de entrada no quieras entrar a las ruinas. Las leyes son las leyes.
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